Hay ocasiones en las que defenderse mínimamente en un idioma foráneo resulta imprescindible para entender lo que un artista determinado, en este caso una cantante, ha querido transmitirnos con su obra.
Pues bien, la canción de la que hoy hacemos una reseña en el blog es un ejemplo de ello, porque salvo que se entienda la letra de Luka, lo natural es quedarse tan solo con su preciosa melodía y una gran voz.
Sin embargo, el tema de la norteamericana Suzanne Vega, narra una amarga historia de maltrato infantil en el hogar, contada en primera persona por el niño que da título a la canción.
Sobre las agresiones a los hijos por parte de sus progenitores ya incidimos en una publicación del blog, al hilo del denominado derecho de corrección, que algunos progenitores convierten en violencia, castigada penalmente.
Evidentemente, lo que Suzanne Vega pretendía ya hace más de treinta años era remover conciencias sobre una problemática social, ciertamente invisibilizada hasta entonces y que desgraciadamente aún se mantiene en parte, no solo por las reticencias/temores de la propia víctima a denunciar a sus propios progenitores (como el propio Luka nos advierte) sino porque los testigos presenciales que ven o escuchan evidencias del maltrato no se atreven a dar un solo paso, para no entrometerse en los asuntos de otros.
En este sentido, también recomendamos la lectura de otro artículo del blog, al respecto de la prueba preconstituida cuando se trata de víctimas menores de edad, tras una reforma que persigue evitar la revictimización de un niño que ha dado el paso de denunciar a sus padres.
Volviendo la canción, hay que destacar que la misma fue incluida en el segundo LP de la cantante, publicado en 1987, Solitude Standing, y constituyó un rotundo éxito, quizás el mayor de su carrera, aupándose a los primeros puestos de las listas de todo el mundo.
Cierto es que, consciente de la trascendencia de su mensaje, la cantante también grabaría una versión de Luka en español, aunque ha sido la original la que ha perdurado y nos quedado para el recuerdo que se mantiene intacto, visto que aún sigue sonando frecuentemente en las radio fórmula de las emisoras.
Michael Patterson y Candace Reckinger, que también ha trabajado con Paula Abdul y el grupo A-ha, serían los encargados de dirigir un videoclip que en el papel de Luka está protagonizado por Jason Cerbone, un actor que luego participaría en cine y series de televisión, sin mayor relevancia, salvo Los soprano.
Con escenas en blanco y negro de exteriores de la ciudad de Nueva York, a las que se añaden breves esbozos de carbonilla en dibujos ( que en una mayor extensión hicieron famoso el Take on me, del grupo noruego) la cantante interpreta el tema mientras conocemos al niño, que atemorizado sube las escaleras y entra en su vivienda, con puertas que se cierran que nos impiden ver el interior del domicilio
Allí reside el peor de los males, la violencia que se ejerce sobre las víctimas más indefensas y que más sufren, hasta el punto de condicionar el resto de sus vidas.
Como siempre, te trasladamos la letra en castellano.
Pero en este caso, aunque preferimos la original, por respeto a la obra de la cantante, reproducimos la que luego cantaría en el idioma de Cervantes y que trató de rimarse lo mejor que se pudo, tras ser traducida del de Shakespeare.
Me llamo Luka
El niño del piso 2
Con mis padres vivo yo
Tal vez conoces ya mi voz
Si oyes ruidos en la noche
Alguien gritando, algún reproche
No preguntes lo que fue
No preguntes lo que fue
No preguntes lo que fue
Creo que soy torpe, un poco
Y no hablo muy alto
Creo que estoy medio loco
A nadie le falto el respeto
Te castigan hasta que lloras
Y después casi sin demora
Ya no quieres protestar
Ya no quieres protestar
Ya no quieres protestar
Nada le pasó a mi ojo
Jugando ayer me lastimé
Eso es lo que les diré
No asunto de la Ley.
Me gustaría pasar un rato
Sin nadie herido y nada roto
No preguntes cómo estoy
No preguntes cómo estoy
No preguntes cómo estoy
Me llamo Luka
El niño del piso 2
Con mis padres vivo yo
Tal vez conoces ya mi voz
Si oyes ruidos en la noche
Alguien gritando, algún reproche
No preguntes lo que fue
No preguntes lo que fue
No preguntes lo que fue
Te castigan hasta que lloras
Y después casi sin demora
Ya no quieres protestar
Ya no quieres protestar
Ya no quieres protestar